Receta: Pechuga de pavo y sandía con salsa de regaliz
Confío en tu capacidad de invención en la cocina, atrévete a salirte del esquema básico de comprar regaliz en los puestos de la calle para sorprender a tus amigos con una receta única que rescata ese sabor agridulce del producto y lo combina con una carne suave, que necesita cierto contrapunto. Si estás listo para reunir a tus amigos, sólo tienes que disponer la mesa para luego echar a andar esta receta tan personal como sabrosa.
¿El menú del día? Pechuga de pavo y sandía con salsa de regaliz.
Ingredientes
• 1 rodaja de sandía
• 200 g de pechuga de pavo
• 2 lonchas de jamón serrano
• 100 g de berros
• 1/2 manzana
• 6 gajos de naranja
• 4 cucharaditas de mermelada de arándanos
• 2 palos de regaliz
• 25 g de azúcar
• 1/2 vaso de caldo de ave
• 1/4 de vaso de nata
• vinagre
• aceite de oliva
• sal, pimienta y curry
Preparación
- Cubrir una bandeja con papel de horno y colocar las lonchas de jamón para luego taparla con más papel. Hornear a 180º C durante unos 10 minutos.
- En una olla, colocar el azúcar y cocinar hasta que tome color caramelo. Entonces agrega la nata, el caldo de ave y los palos de regaliz. Cocina a fuego lento hasta que espese. Apaga y reserva.
- Corta la pechuga en 4 filetes, salpimiéntalos y reserva. Corta las sandías en tiras y colócalas en un filete. Comienza a envolver la tira de sandía y agrega otra tira. Sigue así hasta enrollar todo el filete. Repite la operación con todos los filetes.
- Al terminar coloca un palillo de madera en cada filete para sujetarlos y que no se desarmen.
- En una sartén con un chorillo de aceite, dora los filetes enrollados. Reserva.
- Pela y corta las manzanas en cubos. Agrega los berros y condimenta con sal, aceite y vinagre.
- Al momento de servir, coloca los gajos de naranja sobre la base de los platos. Echa una pizca de curry por encima. Por encima, coloca la ensalada y luego dos cucharaditas de mermelada en cada plato. Por último, agrega los rollitos. Luego sirve una loncha de jamón y rocía con la salsa de regaliz.
Un plato diferente para sorprender en una reunión y conquistar los paladares más exigentes, y más si tienes regaliz cultivado en casa 100% eco. Recuerda que el jamón esté crujiente y la salsa en perfecto equilibrio. Entonces sí, ¡viola, la magia en tu boca!
